El día de ayer nos ofreció los siempre interesantes datos de la encuesta que el CIS realiza periódicamente. Y la verdad, no hubo grandes sorpresas.
Por un lado, el PSOE demuestra su músculo; su consolidación como la opción política preferida y mejor valorada. El partido político que mejor representa a esa mayoría que dice sentirse de centro-izquierda.
Por otro lado, el PP comienza a desplomarse. Los datos del CIS avala la idea de que el PP conservó posibilidades de volver al poder gracias a una estrategia de tierra quemada, de búsqueda del conflicto con el Gobierno de Zapatero, de la mentira y la insidia, del enfrentamiento entre territorios... Una estrategia que mantuvo en vilo y movilizado al electorado de derechas durante la mayor parte de la Legislatura pasada.
Ahora, el pretendido giro de Rajoy (¿hacia dónde? -un giro sin rumbo claro-) desalienta a sus votantes, eleva la crítica a su modo de hacer oposición y cae en intención de voto.
Ojo, el trabajo de campo de la encuesta fue realizado en los inicios de la crisis del PP, cuando sólo Zaplana dijo "ciao". Es probable que en el momento actual, con la guerra desatada entre los "duros" y los "blandos" el PP se encuentre más lejos del PSOE.
viernes, 30 de mayo de 2008
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