domingo, 23 de mayo de 2010

Si no fuera...

... porque es muy serio, porque es muy grave, porque es importante...

En época de crisis, ¿cómo tomar las palabras de Aguirre en las que habla de su pobreza cuando cobra más de 8.000 euros al mes? Seguramente se refería a su pobreza moral.

Cuando está a punto de sentarse en el banquillo de los acusados, ¿cómo tomar las declaraciones de Camps en las que dice sentirse feliz? Definitivamente ha perdido el Norte.

Con la que está cayendo, ¿cómo espera quien pretende gobernar España que le tomemos en serio cuando acepta hacer el ridículo? Una cosa es ser simpático y otra un papanatas.

viernes, 14 de mayo de 2010

Venganza e ira

Hay cosas que cuestan entender aunque se expliquen, y se expliquen bien.

Sin duda alguna, una de ellas es lo que ha pasado con el juez Garzón.

Años atrás, representación de la lucha contra lo más detestable de nuestra sociedad: el terrorismo, la droga..., ahora en ese lugar tan incómodo en el que al mismo tiempo, se recibe el ferviente apoyo de la mitad de la ciudadanía y el odio de la otra mitad.

Para quienes atacan ahora al que antes fue un ejemplo, el punto de inflexión fue la decisión de formar parte de las listas del PSOE tiempo atrás.

Para estos miserables, la sospecha de que Garzón anteponía la ideología a la profesionalidad se habría ido confirmando en los últimos años: primero, tratando de hacer pagar a Pinochet por las aberraciones de su dictadura y más recientemente, trabajando en el sentido de la recuperación de la memoria histórica y por otro lado, contra la corrupción en la política.

Pues bien, Garzón ha perdido. Es el precio que se paga por no resultar indiferente, mediocre, por el compromiso, por la implicación.

La miseria se ha impuesto.

domingo, 2 de mayo de 2010

Velo

Ya ha pasado la avalancha "velista". Por fin. Los medios de este país son capaces de convertir lo anecdótico y extraordinario en un debate nacional.

También son capaces de generar linchamientos, en este caso, de la chica del velo (¿qué más da cómo se llame pues cuántas portadas quiso?). Ella pasaba por allí y los medios la concedieron sus portadas durante una semana. Un auténtico despropósito.

Por lo general, los protagonistas se vuelven víctimas. Y este caso no podía ser una excepción: tuvo que cambiarse de colegio, dejó de asistir a clase y de aquí hasta que retorne al anonimato, para todo el mundo, para sus vecinos, para sus compañeros de clase, para sus profesores, será "la chica del velo".

Tema de otro post es el debate sobre la presencia de simbología religiosa en la red pública de centros educativos, y no tengo el cuerpo pa farolillos.