Las manos a la cabeza

Debe haber todavía muchas personas que no se han dado cuenta de que el sistema capitalista no es un modelo que tenga entre sus principios y objetivos servir de referente en el campo de la ética.

Sólo tal ceguera permite comprender que en estos días, muchos se echen las manos a la cabeza porque el directivo de uno de los más importantes bancos españoles vaya a recibir una enorme cantidad de dinero y un sustancioso plan de jubilación por dejar la entidad.

Me imagino que son los mismos (o parecidos) que se alarmaron porque el Real Madrid pagó cerca de 100 millones de euros por fichar a Cristiano Ronaldo.

¿Por qué ahora tal sorpresa cuando estos sueldos, estos fichajes, estos planes de jubilación, estas indemnizaciones son moneda común entre la élite económica? Seguramente lo único que los convierte en indecentes es la actual coyuntura: la crisis económica.